Mas que de crisis se debería hablar de empacho de la economía. Occidente, es decir Europa y los Estados Unidos ha
vivido muy bien muchos años en parte
por su trabajo, inventiva, riquezas
naturales y en parte también por la
explotación de los países subdesarrollados de los que tomaban, petróleo,
minerales y alimentos a muy bajo precio.
Pero los tiempos van
cambiando las cosas muy lentamente. Occidente trabaja menos, consume más, vive
muy bien y se confía. Engorda. Se hace
obeso, no se mueve. No cambia. De pronto algunos países, subdesarrollados antes,
ahora emergentes como China, India o Brasil, comienzan a crecer y a competir a base de costos laborales muy
bajos y a pujar por los alimentos, el
petróleo y las materias primas. Cuando nos damos cuenta la economía occidental
se ha empachado, gasta, traga y traga,
larillos, coches, viajes, lujos, etc y trabaja cada vez menos. Enferma.
Ante un empacho o indigestión de riqueza lo mismo
que frente a los gastronómicos lo que se impone es la dieta. Pero las dietas son antipáticas . Aquí se trata de
trabajar más y consumir menos. A los
médicos léase economistas y políticos
no se les ocurre otra cosa que llevar al enfermo a la UCI y ponerle mas dosis
de alimento en vena. Lo llaman Plan de Rescate. Siempre se queda mejor con la
familia diciendo que es un caso grave y hay que tomar medidas extremas. La
dieta ni mencionarla. Cualquiera les dice que hay que gastar menos, eliminar
mas de la mitad de los funcionarios, eliminar gastos innecesarios, reducir
sueldos, pagar por la Sanidad, aguantar dosis de medicina nuclear, etc .
Primero, que no les hacen caso; después, a la próxima ocasión cuando haya que
votar los echan o no les pagan. Consecuencia el enfermo se puede poner peor,
tarda más en reponerse y se puede quedar inútil para un montón de años.
Mientras tanto la competencia todavía no ha
engordado, gasta poco, paga menos y aunque no tenga mucha inventiva copia todo
lo que puede. Compite. Cuando el enfermo se despierte y salga de la UCI, no
encontrará pájaro en los nidos de antaño y lo pasará muy mal.
La única esperanza es que entro de unos años les
pasará lo mismo a los nuevos ricos y para entonces Occidente habrá adelgazado y
se le habrá pasado el empacho. Pero el tiempo perdido, perdido estará, y alguna
que otra generación lo habrá pasado fatal.
España es Occidente. Muy Occidente. Y su empacho mayor.
Jose
E. Domenech
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